Hace ya casi un par de meses que salimos de casa.

Nunca había furgoneteado antes. Y así, como lo hago todo, me lancé a la piscina, total si no hay agua me levanto y me voy 😉

En serio, soy un poco inconsciente. Se me ocurre algo y sin pensarlo mucho, lo hago. A veces sale genial otras no tanto, pero oye, al final si no lo pruebas cómo vas a saber cómo es!!

En este post he puesto algunas de las cosas que he aprendido o recordado estas semanas de viaje.

1)Todo se va solucionando.

A veces nos preocupamos de todo lo que podría pasar, y dedicamos más tiempo a eso que a lo que estamos viviendo en este momento.

Creéme por mucho que te preocupes cuando llegue el momento será lo mismo. Es como la relación entre personas, por mucho que imagines como será, al final la cosa sale o no sale. Si que me está saliendo profundo este post … jajaja

Durante estas semanas, en ninguna ciudad tenía el lugar de las quedadas. Y ha sido genial cómo sin pensarlo mucho iban saliendo personas y lugares increíbles dónde hacerla.

Por mucho que lo hubiera imaginado, no hubiera sido mejor a cómo ha ido saliendo todo.

Así que, disfruta de lo que estás haciendo en este momento. Todo lo demás se va solucionando en su momento.

Todo saldrá mejor de lo que hubieras pensado, déjate llevar . Sobre la marcha.

2) El luego no existe.

Tengo que confesarte que soy MUY desordenada. En casa siempre pienso: luego lo pongo en su sitio.. Viviendo en un furgoneta eso no vale. El espacio es tan reducido, y todo va en cadena.

Así que, el luego no existe. He aprendido a poner cada cosa en su lugar aunque me dé un palo extremo (que muchas veces me lo da) . A ver si cuando vuelva a vivir en un lugar estático se mantiene 🙂 .

3) El peinado todoterreno: la trenza

Cómo sabes, durante estas semanas ha llovido (mucho, muchísimo), nevado, vientos huracanados, frío polar…

La manera de que el pelo no se me enredara infinito… ha sido la trenza.

Es sin duda el peinado todoterreno 🙂 .

 4) Cómo funcionan las baterías

Prácticamente he dormido todos los días en un camping, o en casa de amigos. Aunque hoy justo voy a dormir por ahí..

He descubierto que las baterías duran bastante. Realmente puedes encender la calefacción durante unas horas + encender luces y que no se gasten.

Eso si! La nevera gasta muchísímo, ya te contaré ahora que viene el calorcito cómo me lo monto.

5) Todo tiene su ritual. 

Sin darte cuenta vas creando como un sistema para todo. Por ejemplo, el ritual para dormir : Abrir cama+ dar la vuelta asiento + poner aislantes  térmicos+ ropa de cama arriba

6) Se puede dormir abajo

Debido a la meteorología extrema ha habido días que he dormido abajo, es decir, no he levantado la cama.

La primera noche, no pegué ojo, ya que Bongo ocupaba todo el espacio.

Pero luego aprendí a que si él dormía encima del baúl se podía!!

Así que, pongo el colchón de arriba abajo cómo si fuera una barca, Bongo encima del baúl. Y Vespa duerme conmigo o encima del asiento.

7) Traviajar es difícil.

Estoy en ello todavía, para que te voy a engañar. Esta siendo lo más difícil. No tiene nada que ver viajar solamente que además tener que mantener tu propia empresa y atender a todos los alumnos.

Está siendo complicado llegar a todo. He descubierto que lo mejor es cambiar menos de destino, es decir, si cada día duermes en un lugar diferente es difícil que te quede tiempo y energía para trabajar.

Y luego,  aprovechar al máximo los momentos de concentración, así por ejemplo, los domingos por la tarde (que no me sientan del todo bien) los dedico a contestar mensajes, visualizar los vídeos de los alumnos.. y puedo estarme muchas horas.

8) Este viaje sin ayuda hubiera sido imposible.

La incorporación de Patri al equipo ha sido imprescindible para sacar adelante todo. De verdad, es la mejor compañera de trabajo que nunca hubiera imaginado. Una vez más, todo sale solo.

9) Vas de viaje con la misma persona que está en casa.

Todos tus puntos débiles, tus ralladas, tus problemas todos vienen contigo. Viajar es más un viaje hacia dentro que hacia fuera.

Da igual que estés en París o en Cuenca, viajas con la misma persona: contigo. Así que, por mi experiencia si estás mal emocionalmente no emprendería un viaje como este. Y si lo haces, ten claro que todas esas cosas van a salir, y tendrás que lidiar con ello. De hecho, en este viaje ha salido uno de mis problemas: la adicción al trabajo. Estoy lidiando con ello cada día.  Lo bueno, es que todas esas cosas que me van saliendo, las voy a apuntando en mi cabeza. Esas son las que tengo que trabajar. Vamos evolucionando como Picachu.

10) Hay personas increíbles por el camino

Este viaje me está permitiendo conocer personas nuevas y conocer mejor a personas que ya conocía. Y me está encantando!

11) Los perros se adaptan a todo mejor que tú.

Antes de emprender el viaje, no sé si recuerdas que temía por el bienestar de Bongo.  Se me había olvidado que se adaptan mucho mejor que nosotros a TODO. Y así está siendo, Bongo y Vespa están mejor que nunca.

Se amoldan a cualquier situación: descanso, actividad, lugares diferentes, con perros difrents, personas, me tienen enamorada! 

12) El descanso del Guerrero

Cómo te contaba antes, viajar trabajando no es lo mismo que viajar sin más. Estás continuamente pensando en buscar un lugar y momento para llevar al día tu empresa. Así que, es importante tomarse días libres de redes sociales, de obligaciones. Y pasara viajar solamente. 

13) La cabra tira al monte.

En este viaje me estoy dando cuenta que dónde mejor me siento y disfruto es en las zonas verdes y azules del mapa.

14) Cada ciudad tiene una mentalidad diferente respecto a los perros.

A veces cambia incluso en un trayecto de media hora. Estoy aprendiendo mucho de la relación que tiene cada uno con su perro. Y estoy cogiendo aún más fuerza para divulgar y hacer llegar el conocimiento a más personas. Los perros lo necesitan. 

15)  ‘La Guerrera’ es casa.

Nunca pensé que un lugar tan pequeño podría aportar esa sensación. Realmente tanto Bongo y Vespa, como un servidora hemos encontrado en ella nuestra casa. 

16) Cuidado físico

Me gustaría tener más disciplina. Es cierto que estamos caminando de media unos 30 km diarios. Pero no consigo llevar al día ejercicios para fortalecer la espalda, estiramientos… me tendréis que ayudar!!

17) Todo depende de cómo te lo tomes.

Esto es algo que el viaje me está recordando.  Siempre he pensado que una misma situación depende totalmente de con la actitud que te lo tomes. Hace años que decidí no quejarme. Dedico esa energía a construir la solución. A veces incluso me paso y me adelanto a los acontecimientos.

Pero siempre con una sonrisa.

Espero que te haya gustado este post un poco más personal. Me estáis ayudando muchísimo y estoy disfrutando mucho de compartir toda esta experiencia con vosotros.

GRACIAS!!

Próxima parada: Córdoba 🙂

PAT